Arraigo, compromiso, esfuerzo y emprendimiento han sido algunos de los valores que el grupo Agroalimentaria Chico ACH ha querido trasladar a los estudiantes que participaron en el Programa “Empresa Familiar en las aulas”, impulsado por la asociación Empresa Familiar de Castilla y León (EFCL) con la colaboración de la Consejería de Educación.
En el marco de esta iniciativa, el CEO de este grupo burgalés, Jaime Chico, ofreció una charla a medio centenar de alumnos de 6º de Primaria y 1º y 2º de ESO del Colegio San Gabriel de Aranda de Duero, para explicar la importancia de la empresa familiar en su entorno, a través del ejemplo de la trayectoria empresarial de su familia.
Así, explicó a los estudiantes cómo fueron los orígenes de la compañía, que se remontan al año 1965, cuando sus padres Miguel y Justina comenzaron a comprar los primeros lechones para su engorde, construyendo cuatro años después su primera granja en Tejares.
Con su traslado a Aranda de Duero en 1972, la familia constituyó formalmente la empresa, que progresivamente fue ampliando su actividad, con la fabricación de pienso y la transformación, elaboración y comercialización de productos cárnicos y embutidos.
Actualmente, el grupo Agroalimentaria Chico ACH está conformado por las empresas Agroalimentaria Chico, S.A.T. Hermanos Chico, Chico Galindo y Cárnicas Chico, y cuenta con un centro de inseminación, fábrica de piensos, granjas de cría y engorde, sala de despiece y una fábrica de embutidos, así como una tienda para su venta. En total, el grupo está integrado por más de 250 personas, entre ganaderos y empleados de sus distintas empresas.
En la charla, Jaime Chico destacó la humildad y el compromiso como guías en la trayectoria del grupo, que apuesta por seguir manteniendo y potenciando su actividad en el entorno rural en el que está enclavado, favoreciendo así el desarrollo del campo de Castilla y León.
En este sentido, explicó que la compañía cuenta con el programa “Tu Granja, tu futuro” para favorecer la repoblación en el mundo rural, ayudando a los agricultores a revitalizar sus explotaciones agrarias a través de asesoramiento integral, apoyo técnico para la construcción de nuevas granjas y formación continuada, garantizando además su viabilidad a través de un contrato de integración.
Jaime Chico concluyó su intervención apuntando a la sostenibilidad y la digitalización como los principales retos en los que está inmerso actualmente este grupo agroalimentario, algunas de cuyas instalaciones pudieron conocer los estudiantes a través de varias visitas organizadas días más tarde dentro del programa.
Junto a Agroalimentaria Chico ACH, también participan en la cuarta edición del programa las empresas burgalesas Grupo Cropu y Aciturri, que a principios de este mes recibió la visita de 35 alumnos de 1º de Bachillerato del Colegio Sagrados Corazones de Miranda, como continuación a la charla impartida previamente en este centro por su presidente, Ginés Clemente.
Además de fomentar el emprendimiento a través del ejemplo de la empresa familiar, el programa también está sirviendo para orientar a los jóvenes sobre su futuro laboral y demandas del mercado, dando a conocer las oportunidades que ofrece la Formación Profesional y el emprendimiento como opciones de futuro.
En total, son 24 las empresas familiares pertenecientes de EFCL que están abriendo sus puertas a más de un millar de estudiantes en el marco de este programa, desarrollado a través de la Fundación de Empresa Familiar de Castilla y León y con la colaboración de la Dirección General de Innovación Educativa y Formación del Profesorado.
Diseñado por EFCL, el Programa “Empresa Familiar en las aulas” fue implantado por primera vez en Castilla y León durante curso 2018-2019 y desde entonces más de 2.700 estudiantes de toda la Comunidad han podido conocer los valores de la empresa familiar, así como su papel y relevancia en la economía y sociedad.
En años posteriores, el programa se extendió a otras comunidades autónomas como Navarra, Castilla-La Mancha y Galicia y este curso también se está desarrollando en Asturias, Andalucía, Madrid, Euskadi y Extremadura de la mano de las respectivas asociaciones territoriales de empresa familiar.
